Además, vistió la camiseta rojiblanca entre 2004 y 2007 y guarda muy buenos recuerdos de sus temporadas como jugador del Ájax. "Fue una época preciosa", comenta sin ninguna duda en su voz. "Pude formar parte de un equipo increíble y tuve la oportunidad de desarrollarme como futbolista. Siempre estaré agradecido al Ajax por esos años maravillosos. Pude exhibir mis cualidades en el escenario europeo más importante, la Liga de Campeones. También disfruté muchísimo de las veces que disputé el Clásico neerlandés contra el Feyenoord."
Durante los primeros días de Rosales en Ámsterdam, Maxwell tuvo un papel muy importante en la vida del argentino. El exjugador del Ajax siempre podía contar con el lateral brasileño, que también hablaba español. "Cuando llegué a los Países Bajos aún no sabía inglés y él me resultó de mucha ayuda."
'Mis compañeros de equipo eran mi familia'
Maxwell, que ya llevaba bastantes años en el Ajax, enseñó todo a su compañero argentino y le daba consejos con regularidad. "Poco a poco, fui asumiendo mi responsabilidad y empecé a valerme más por mí mismo. La comunicación con mis compañeros de equipo mejoró y acabé teniendo una relación estrecha con gente como Klaas Jan Huntelaar, John Heitinga, Hedwiges Maduro y Yannis Anastasiou."
Rosales dejó Sudamérica por Europa a los 23 años, lo que supuso que pudiese ver a su familia mucho menos. "En aquel momento, el Ajax era mi casa y mis compañeros de equipo eran mi familia. Me ayudaron a convertirme en un hombre de verdad."
Sus excompañeros Huntelaar, Heitinga, Maarten Stekelenburg, Wesley Sneijder y Rafael van der Vaart llegaron a la final del Mundial de 2010. Rosales se sintió orgulloso de esa hazaña de los "Oranje". "En mis años en el Ajax, todos ellos aún eran bastante jóvenes. Fue muy bonito ver su evolución desde que llegué a Ámsterdam hasta la final de aquel Mundial. Me encantó ver a mis antiguos compañeros brillar en Sudáfrica unos años más tarde."
Campeón del mundo sub-20 con Argentina
Rosales también recuerda con cariño su etapa como internacional argentino. Compartió vestuario con estrellas como Gabriel Batistuta, Hernán Crespo, Carlos Tévez y Lionel Messi, entre otros. El exjugador del Ajax se proclamó campeón del mundo sub-20 con Argentina en 2001, ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de 2004 y participó en la Copa América de ese mismo año, en la que los argentinos perdieron la final en la tanda de penaltis contra el anfitrión, Brasil.
Grave lesión de tobillo
"Jugamos prácticamente con la misma plantilla durante seis o siete años. Lo ganamos casi todo, fue un período realmente increíble. El 70% de los jugadores que fuimos campeones del mundo en 2001 también ganamos la medalla de oro en Atenas", comentó Rosales.
Tras la final perdida de la Copa América, los argentinos pasaron a centrarse en el Mundial de 2006. "Ahí es cuando llegué al Ajax. Sufrí una grave lesión de tobillo en el partido contra el Willem II, por lo que acabe perdiéndome el Mundial de Alemania. Puedo decir que tuve una buena carrera internacional, pero me da mucha rabia no haber jugado nunca en un Mundial".
'Maradona me regaló su camiseta'
Según Rosales, Diego Armando Maradona es, junto con Messi, el mejor futbolista de la historia de su país. El antiguo extremo derecho del Ajax se encontró en una ocasión con El Pelusa, su gran ídolo, en la ciudad argentina de Rosario. Maradona fue a ver un partido del Newell's Old Boys, el club del que el Ajax fichó a Rosales en 2004. "Cuando terminó el partido, nos enteramos de que Maradona había ido a verlo y me hacía muchísima ilusión conocerle. Había marcado dos goles y pregunté al director técnico si Maradona podría firmarme la camiseta. Y él me dijo que Maradona quería mi camiseta... fue algo muy extraño", comenta Rosales con una sonrisa.
"Unos años más tarde, fui a visitar a un amigo a Buenos Aires. Fuimos a ver un partido estilo "Super Bowl" en el que exfutbolistas argentinos jugaban contra equipos de otros países. Vi a Maradona en el vestuario y fui a saludarle, y entonces él me regaló su camiseta. También me la firmó y ahí la tengo, colgada en casa. Así que al final acabamos intercambiando camisetas, aunque fuera indirectamente."
Pese a la derrota de Argentina por 1-2 contra Arabia Saudita en el primer partido de la fase de grupos, Rosales tiene buenas sensaciones. "Han jugado una buena Copa América y tienen muchos jugadores de calidad. El equipo es muy sólido, ya llevan jugando juntos unos tres años. Y no son solo los once titulares habituales, toda la selección está a un altísimo nivel. Pero no hay que olvidar que hay varios equipazos peleando por ganar la Copa del Mundo."
