Martínez es un defensor relativamente bajo de altura, pero demuestra diariamente que eso es un detalle irrelevante. "Cuando era chico, la gente ponía en duda mi estatura. Eso fue algo que a mí me motivaba. Siempre pensaba: ‘bueno, no confíes. Yo confío en mí mismo.’ Siempre tuve la motivación para seguir pensando así", comenta Martínez.
El entrerriano, querido por su mentalidad luchadora, explica cómo trabajaba ya de chico. "Era el primero en querer aprender todo, el primero en querer mejorar. Si tenía alguna falencia, hacía todo para mejorarla. Así es como llegué a mi nivel actual. Ahora no se habla mucho de mi estatura, porque eso ya no es importante si uno tiene buen timing. Trabajé muchísimo para mejorar eso. Hay que demostrar que puedes todo lo que te propones en tu mente."
‘El sueño de cada argentino’
Con su rol importante en Ajax, es muy probable que Lisandro Martínez jugará muchos partidos en el verano europeo. Se vienen las clasificatorias de la Copa del Mundo para Argentina, y también se acerca la Copa América. Por ahora, el defensor solamente jugó un partido con el equipo nacional.
"La Selección es muy grande. Argentina tiene muchas estrellas y muchos jugadores de alto nivel. No es fácil llegar a estar ahí, pero confío en lo que soy. Voy a seguir trabajando de la misma manera. Ponerse la camiseta de La Selección es el sueño de cada argentino. Lucharé el máximo posible para lograr eso."
Esa motivación y mentalidad es lo que Ajax necesita en la parte final de la temporada. Este domingo, Ajax tiene que empatar o ganar contra FC Emmen para salir campeón de la liga neerlandesa. Para Martínez sería su primer campeonato con Ajax.
"Tenemos que seguir jugando con la mentalidad que hemos tenido en los meses pasados. Salir campeón en Ajax sería un orgullo enorme. Voy a ser el hombre más feliz en el mundo. ¿Lo que tiraré esta vez a los hinchas que están celebrando? Capaz que tire mis jeans o mi camisa", dice el argentino riéndose.